El escaneado 3d consiste en pasar un objeto físico a uno virtual para lo que utilizamos un escáner 3d el cual es el encargado de registrar la geometría del objeto y pasarla al ordenador. La digitalización 3d permite reducir costes y tiempo de fabricación por lo tanto elimina pasos en el proceso productivo. Ahora podemos partir de un original, escanearlo y reproducirlo en diferentes materiales y tamaños gracias a la versatilidad que nos ofrece esta técnica.
Para realizar un escaneado 3d no es necesario tocar la pieza con lo que no existe contacto entre el escáner y el objeto, por lo tanto, es ideal para la conservación de obras de arte o patrimonio. El escáner funciona proyectando un patrón de luz sobre el objeto que una cámara “lee” y finalmente nos muestra el resultado en la pantalla en forma de malla de polígonos o nube de puntos.
Mediante fotogrametría podemos realizar un registro del color del objeto en alta resolución como complemento a la toma de datos mediante el escáner 3d. Ten en cuenta que son dos técnicas diferentes y que cada una de ellas las hacemos de forma independiente.